Psicología Existencial Positiva
La Psicología Existencial Positiva, también conocida como la Segunda Ola de Psicología Positiva, es un paradigma fundado en 2010 por Paul T. P. Wong, el cual integra la psicología existencial humanista y la psicología positiva. Este paradigma reivindica la inclusión del sufrimiento y otros aspectos negativos de la vida (por ejemplo, traumas, pérdidas, enfermedad, crisis existenciales, muerte) a la hora de desarrollar una teoría del bienestar psicológico. Estos aspectos, aunque son generalmente indeseables, también pueden ser potencialmente beneficiosos. Por ejemplo, pueden servir como promotores de sentido en la vida, crecimiento personal y resiliencia. La psicología existencial positiva está sustentada en la evidencia empírica, contando con numerosos estudios científicos en una amplia gama de culturas que demuestran su solidez e importancia en la salud mental.
Desde la psicología existencial positiva se ha propuesto un nuevo modelo científico (aunque enraizado en corrientes filosóficas tradicionales) de felicidad, llamado Mature Happiness. Según este modelo, la felicidad no consiste solamente en experimentar emociones positivas y estar satisfecho con la vida. La mature happiness consiste en un estado general de armonía interior, armonía en las relaciones personales, tranquilidad, paz mental y flexibilidad psicológica. Este estado psicológico es el resultado de integrar y dar sentido tanto a los aspectos positivos de la vida (valores, sentido en la vida, relaciones positivas, apreciación de la experiencia, etc.) como a los aspectos negativos (traumas, vulnerabilidad, limitaciones personales, afrontamiento del estrés y sufrimiento, etc.). En un estudio realizado en 30 países dirigido por el Dr. David F. Carreño y colaboradores (2021) durante el inicio del COVID-19, este modelo de felicidad mostró una mayor relación con la salud mental que el modelo más conocido de la psicología positiva (PERMA), el cual se centra solo en la positividad.
Los principios básicos de la psicología existencial positiva son: a) la adopción de una visión del mundo realista que incluya el lado positivo de la vida pero también la inevitabilidad de los eventos negativos; b) la importancia de aceptar, e incluso aprovechar, las emociones y pensamientos dolorosos; c) un afrontamiento dialéctico de las demandas de la vida, respondiendo de forma efectiva tanto a los aspectos positivos (a través de la búsqueda y la aproximación) como a los aspectos negativos (mediante una evitación adaptativa o la aceptación); y d) la inherente búsqueda humana del sentido en la vida que sirve para transcender incluso las circunstancias más adversas. En línea con las ideas originales de Viktor Frankl, el sentido en la vida pone el énfasis en el concepto de autotranscendencia. La autotranscendencia consiste en la persecución de unas metas y valores que, aunque incluyen a uno mismo, van más allá de éste, buscando también la contribución a otras personas o causas.
Basado en estos pilares, en los últimos años se ha desarrollado un estilo de afrontamiento psicológico llamado Afrontamiento Centrado en el Sentido (Meaning-Centered Coping). Este estilo de afrontamiento se centra en fomentar el sentido en la vida, especialmente en situaciones adversas, mediante el uso de estrategias emocionales, cognitivas y conductuales. Entre estas estrategias destacan la reinterpretación positiva, el coraje existencial, la esperanza, la apreciación de la vida, la cercanía interpersonal, las acciones valiosas o responsables y la prosocialidad. El afrontamiento centrado en el sentido ha mostrado un efecto significativamente beneficioso contra la depresión, la ansiedad y el estrés, especialmente en personas más vulnerables. En un estudio internacional a gran escala llevado a cabo por la Dra. Nikolett Eisenbeck y colaboradores (2022) durante las peores fases del COVID-19, el afrontamiento centrado en el sentido fue claramente un mayor protector de la salud mental que otras estrategias tradicionales de afrontamiento, incluyendo la aceptación.
Además de estos principios y procesos psicológicos, la psicología existencial positiva está generando muchas otras aportaciones teóricas y prácticas. Este paradigma está fuertemente enraizado en la multiculturalidad y la integración, teniendo un marcado compromiso con el fomento de los valores prosociales y la responsabilidad.
Ver abajo la conferencia en la Universidad de Almería donde el Dr. Paul Wong introduce la Psicología Existencial Positiva: